«Disfruta de la comedia que es mi vida». Con esta oración Laura da la bienvenida a todos los que entran en su perfil de TikTok para ver sus vídeos. Un vistazo rápido a su cuenta hace que te des cuenta de que ella es alguien que, continuamente, se ve envuelta en situaciones extrañas.
Una de estas situaciones ocurrió cuando viajaba y se quedó dormida en un aeropuerto mientras esperaba su vuelo, algo que, si has paseado por una terminal, es una estampa bastante común. Sin embargo, otro turista se convenció de que, en realidad, Laura estaba muerta y llamó a seguridad.
Así lo explica en unos de sus vídeos, donde la joven añade que el incidente tuvo lugar cuando tuvo que reservar autobuses hacia el aeropuerto a «horas impías». Con su vuelo programado para las 7:00 horas, el autobús de enlace la recogió a las 4:00 horas y llegó al aeropuerto a las 5:30 horas. Como disponía de tiempo de sobra, decidió recuperar el sueño perdido y se echó una siesta en la puerta de embarque para no perder el vuelo.
Laura dijo que, debido a su estatura es, «básicamente, un bocadillo del tamaño de un viaje» y, por eso, pudo acurrucarse en una «linda bolita» para disfrutar de su siesta. Cuando estaba dormida, se despertó y se encontró con unas manos en su cuello.
Los miembros de seguridad dijeron: "No se preocupen, amigos, está viva. Todo bien". Tras recalcar que no había muerto, Laura explicó que el hombre que se había sentado frente a ella pensó que había fallecido porque sus ojos se habían abierto durante la siesta y ella no respondía a sus intentos por despertarla.
El «terrible hábito» de abrir los ojos durante el sueño se desarrolló en la universidad, aunque la joven no preveía, hasta entonces, que esto pudiera alarmar a la gente que no conocía este hecho. Obviamente, la situación tuvo un final feliz.