Desde este miércoles, los diez puestos de flores de La Rambla de Palma mostrarán un cartel recomendando a los clientes realizar sus encargos con antelación ante la festividad de Tots Sants. Una fecha, el 1 de noviembre, en la que miles de personas acuden a los cementerios a llevar flores a sus difuntos. Este año, a causa de la pandemia, el Ajuntament de Palma está trabajando en medidas preventivas, que incluyen un sistema de solicitud de cita previa que permita ordenar las visitas a los cementerios municipales de la capital balear y evitar las aglomeraciones.
«En años anteriores, a fecha de hoy ya teníamos una previsión del género que debíamos pedir a los proveedores y floricultores», comenta Margarita Sastre, tercera generación de Flors Marga, que lleva 14 años trabajando en el puesto. «Me parece bien que se pida a la gente no concentrarse el mismo día, pero no estoy de acuerdo en que limiten la entrada en el cementerio. Es un espacio abierto y mucho más amplio que las grandes superficies comerciales, donde la gente no tiene que pedir cita previa para entrar», añade.
Sin información oficial
Las floristas confirman que nadie les ha informado de forma oficial al respecto. «Lo que sabemos es por la prensa», asegura Mercedes Zoroa, que lleva 50 años trabajando en Flores Mercé. «Muchos clientes han venido a preguntar cómo tienen que hacer o dónde deben llamar para pedir cita previa para ir al cementerio. En cuanto lo sepamos pondremos el número de teléfono en el puesto, pero desde este miércoles pondremos un cartel para recomendar que hagan sus encargos cuanto antes».
A diferencia de años anteriores en los que el crisantemo era la flor más solicitada, en los últimos tiempos existe una gran variedad de ramos y centros formados por claveles, margaritas, rosas, etc. «Cada vez se llevan más los centros en forma de abanico. Las coronas prácticamente solo se venden el día del fallecimiento», comenta Magdalena Sastre, de Flores Florinda. Esta florista se pregunta «¿tú crees que la gente mayor va a reservar por internet o a hacer cola?. Quien acude al cementerio, en su mayoría, es gente mayor y le tienen que acompañar hijos o familiares, no pueden cargar con los ramos o dejar los coches lejos del cementerio. Por otro lado nosotros tenemos ya que pedir el género y aún no sabemos como estará la situación».
Un floricultor, que lleva 34 años en la profesión, confiesa que «lo peor de todo no es que a día de hoy no se haya realizado previsión de género, sino que no hay alegría».