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Mario Benedetti en Palma, de la discreción a la lucha contra el olvido

Huella mallorquina. Mario Benedetti vivió en Palma entre 1980 y 1983, donde escribió ‘Primavera con una esquina rota’ y cuentos que conforman el libro ‘Geografías’. | Efe

| Palma |

En el año 2009, la biógrafa Hortensia Campanella decidía titular su libro como Mario Benedetti. Un mito discretísimo. Este lunes 14 se cumplirán cien años del nacimiento del escritor, que vivió en Palma durante tres años y estuvo veraneando otros quince en el Port de Pollença. Vista la escuálida repercusión de la efeméride, parece que la distancia que va de la discreción al olvido sea mínima.

Mario Benedetti (Tacuarembó, Uruguay, 14 de septiembre de 1920 – Montevideo, Uruguay, 2009) escribió en Mallorca Primavera con una esquina rota (1982), que obtuvo el Premio Llama de Oro 1987, de Amnistía Internacional. La novela ofrece el testimonio directo de la sociedad uruguaya oprimida por la dictadura, y presenta la visión de la profunda conmoción de lo que sucede, desde el exilio. En la Isla, donde vivió entre los años 1980 y 1983, Benedetti también escribió los cuentos y poemas que conforman el libro Geografías. Un médico argentino le aconsejó dejar Mallorca a causa del asma que padecía, y se instaló en Madrid, aunque siguió veraneando durante años en el Port de Pollença, en el Hotel Sis Pins, alojándose siempre en la misma habitación. En 1985, Benedetti regresó a la Isla para elaborar un libro de artista con el escultor Enrique Broglia, que incluía el poema El Baquiano y los suyos, de homenaje al escritor y político José Gervasio Artigas, con ocho litografías.

En una crónica de S. Coquillat, publicada en Ultima Hora (25/9/2006), su amigo Coco Meneses comentaba que, al llegar a Palma, «Benedetti alquiló un apartamento en la plaza Gomila, por 300 dólares; su situación económica no era buena porque sus derechos de autor estaban prácticamente congelados a causa de su comportamiento político y no publicaba sus obras en países como Uruguay, Argentina y Chile». Benedetti abandonó su país tras el golpe de Estado del 27 de junio de 1973 y se exilió en Argentina, Perú, Cuba y España. Así llegó a Mallorca, en un vuelo procedente de París. La mala situación económica mejoró al vender los derechos de La tregua para una serie colombiana y Benedetti pudo comprarse un apartamento en la calle Port de Cariño, en el barrio del Fortí de Palma.

Mario Benedetti, Enrique Broglia y Pep Sitjar, en 1985.

Entre los discretos homenajes a Benedetti, hay que destacar que la Asociación de la República O. Del Uruguay de Mallorca ha organizado un certamen literario, de poesía y narrativa. Está programado que se entregue en un acto que coincida con el día en el que habría cumplido cien años. Los responsables de la librería Embat de Palma celebrarán un recital donde participarán lectores y amigos del autor en Mallorca. Probablemente se celebrará, según avanzan, a finales de este mes o a principios de octubre. Además, desde la misma librería ha surgido la propuesta de instalar una placa conmemorativa en la calle palmesana donde vivió el escritor. En Madrid, el Instituto Cervantes y la editorial Alfaguara celebrarán el lunes un recital poético con Joaquín Sabina, Chus Visor, Ismael Serrano, Leiva y Elvira Sastre, entre otros. Alfaguara publica Antología poética, preparada por Joan Manuel Serrat que, en 1985, trabajó con Benedetti en la producción del disco El sur también existe. Alianza Editorial se suma a la conmemoración con la publicación de los cinco títulos presentes en su catálogo en versión digital: La tregua, Gracias por el fuego, Pedro y el Capitán, Antología poética y Cuentos.

La Universidad de Alicante, donde tiene un centro de estudios latinoamericanos con su nombre y está depositada parte de su biblioteca personal, ha suspendido el congreso 100 años de Mario Benedetti, por la situación sanitaria, que debía celebrarse del 21 al 23 de octubre. En Valencia, se prevé la celebración de un Encuentro Internacional de Poetas que recordará su figura. En Uruguay, la celebración del centenario se divide en actos estrictamente literarios y eventos solidarios, como la entrega del tercer Premio Mario Benedetti a la lucha por los derechos humanos. Se prepara un homenaje virtual consistente en la locución de relatos del autor, por parte de creadores de Argentina, Chile y España. El bailarín Igor Yebra ultima la creación de un espectáculo de danza basado en La tregua.

El autor uruguayo en una de sus visitas a Palma.

El centenario de Benedetti coincide con los 60 años del boom latinoamericano, del que él no formó parte de forma activa, y que encumbró a novelistas como García Márquez o Vargas Llosa, entre otros, instalados en esa época en Barcelona.

En la biografía de Hortensia Campanella, se apunta que fue en Madrid donde el matrimonio Benedetti conoció al editor Jesús García (Colección Visor de poesía), que les presentaría a los propietarios del Hotel Sis Pins del Port de Pollença, con los que forjaron una buena amistad. Es el mismo establecimiento donde Agatha Christie parece que escribió la novela menor Problema en Pollensa, y que acaba de publicar en castellano la editorial Espasa. En una ocasión, Benedetti se desplazó desde su lugar de veraneo para cubrir el Premio Formentor.

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