Todas las playas de Mallorca tienen una calidad suficiente en el agua para permitir el baño. Según un estudio de la Agencia Europea de Medio Ambiente, en el que analizan los lugares de baño, las costas mallorquinas gozan de buena salud. Unos sitios más que otros.
El informe señala que hay nueve playas que tiene una calidad del agua buena, mientras que el resto son excelentes. Entre las zonas menos recomendadas está Can Pere Antoni, s'Arenal, el Port de Sóller, Cala Esmeralda, Camp de Mar, Santa Ponça, Peguera y la playa des Brismar.
Para clasificar las zonas de baños, el NÁYADE (Sistema Nacional de Información de Agua de Baño) mide los niveles en agua de dos contaminantes nocivos de origen fecal, la Escherichia Coli (la bacteria E. Coli) y el Enterococo intestinal. Con este análisis pueden conocer la salubridad del agua y disfrutar con tranquilidad de una agua limpia.
El mapa superior señala las playas con menor calidad, aunque aun así cuentan con el aprobado de la institución pública. El resto de la costa recibe una nota excelente.
Del mapa llama la atención que la playa de Can Pere Antoni tenga una calidad «buena», mientras que la de Ciudad Jardín obtiene una valoración «excelente». Desde hace varios veranos, las playas de Palma han tenido que se cerradas por vertidos tras días de lluvia.
Esta normativa de salud pública se encuentra en el Real decreto 1341/2007, del 11 de octubre, sobre la gestión de la calidad de las aguas de baño. Desde los ayuntamientos e instituciones autonomías están obligados a hacer un seguimiento de la calidad del agua de baño, con un calendario de muestreos semanal e itinerante tanto por las playas como en todas las zonas de baño.
Además, la Conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca realiza sus análisis microbiológicos periódicamente, desde su laboratorio oficial y los resultados se exponen en los paneles de información de las playas, en la web y además, están recogidos en el Sistema de Información Nacional de Aguas del Baño.