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Mallorca descorcha sus vinos en Madrid

Can Vidalet ha colocado cinco vinos en el salón madrileño. | José Sevilla

| Madrid |

«Buscamos distribuidores en la Península». «La gente se sorprende del buen vino que elaboramos en Mallorca». Son algunas de las frases que destacan los responsable de las ocho bodegas mallorquinas que participan desde este lunes en Madrid en el XX Salón de los Mejores Vinos, de la Guía Peñín, la Guía Michelin del sector. En la feria se dan cita las 350 mejores bodegas del país con más de 2.000 vinos procedentes de 67 denominaciones de origen, además de contar con el patrocinio de Quely.

A esta edición han acudido los productores de Mallorca Binigrau (Sencelles), Finca Can Axartell (Pollença) y Bodegas Can Vidalet (Pollença) -ya presentes en 2018-, a las que se unen este año Bodega Biniagual (Binissalem), Bodega Blanca Terra (Porreres), Bodegas Ribas (Consell), Celler Tianna Negre (Binissalem) y Vins Miquel Gelabert (Manacor). Entre todas presentan más de 40 marcas de tinto, rosado y blanco que han obtenido más de 90 puntos en el principal encuentro nacional del sector vinícola.

«Hay que hacer marca cuando las cosas van bien. Toda publicidad es buena», indica Miquel Gelabert, copropietario de Vins Miquel Gelabert.

Exitoso también es el estand de Tianna Negre con nueve vinos con más de 90 puntos. «La gente disfruta de los vinos con variedades de uva de la tierra como son giró ros, manto negro y callet», explica Xisca Morey.

Mención aparte merece «la bodega familiar más antigua de España», según destaca Sylvia Ottmann, desde el expositor de Bodegas Ribas, acompañada de Araceli Servera Ribas. «Es más fácil encontrar nuestras marcas en Alemania que en España», se lamenta.

Cerca están los vinos de Biniagual. «Buscamos un distribuidor en Madrid», asegura Joan Mestre. Por su parte, Elisabet Batle, de Binigrau, explica que venden en Mallorca y exportan a Alemania, Bélgica, Estados Unidos, Suiza, Dinamarca y Suecia.

Finalmente, Agustí Mascaró, de Finca Can Axartell, reconoce que «es complicado entrar en el mercado de la Península», de ahí su presencia en el salón.

Por su parte, bodegas ausentes como José Luis Ferrer explicaron que este año han preferido acudir a la cita de Peñín en Barcelona.

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