Muchos acontecimientos políticos tienen su banda sonora y en Austria ha sido «We're going to Ibiza», un tema bailable de 1999 e inesperada canción protesta después de difundirse un vídeo grabado en esa isla española que causó la dimisión del vicecanciller ultra Heinz-Christian Strache.
Esta canción de los holandeses Vengaboys, coreada por miles de personas en las protestas del pasado sábado para pedir elecciones anticipadas frente a la sede del Gobierno austríaco, se encuentra ahora en el número uno de los sencillos más vendidos en Austria en iTunes, la tienda digital de Apple.
En el vídeo clandestino grabado en una mansión de Ibiza se ve a Strache prometiendo contratas y favores políticos a una supuesta millonaria rusa a cambio de financiación ilegal de su partido, lo que causó su dimisión el sábado y dinamitó el Gobierno de coalición entre conservadores del ÖVP y ultras del FPÖ.
El comediante alemán Jan Böhmermann, que se especula que conocía el vídeo de Strache antes de su difusión el viernes, publicó en su cuenta de Twitter un enlace con la canción ese mismo día.
El mensaje de Böhmermann tuvo una gran difusión y al día siguiente la canción se puso de forma repetida a todo volumen frente a la cancillería para exigir elecciones anticipadas, que finalmente se celebrarán el próximo mes de septiembre.
La vuelta de «We're going to Ibiza» a la lista de los sencillos más vendidos en Austria ha sorprendido a los propios Vengaboys.
«Uau, 'Going to Ibiza' es número 1 en Austria», señala el grupo en su cuenta de Twitter.
Además de esta canción, otros muchos productos con referencias a Ibiza, como bolsos o camisetas, se han convertido en productos populares entre los detractores a la formación de ultraderecha FPÖ.
Incluso un diario y una televisión han anunciado un sorteo para pasar unos días en «la mansión de Strache», en la que se grabó el polémico vídeo que acabó con la carrera política del líder ultra.