La imagen del enfado de las dos reinas, Letizia y Sofía, en la Catedral de Mallorca, ahora hace un año, dio la vuelta al mundo. El desencuentro entre ambas a las puertas de la Seu, cuando doña Sofía quería realizarse una fotografía con sus nietas y Letizia no lo permitió, vino a confirmar la tensión existente entre suegra y nuera, al menos en ciertos temas.
El rifirrafe saltó en Twitter, con la publicación de un breve vídeo en el que se podía ver cómo la reina Letizia se interponía para que la foto no se hiciera. Hacía años que el Rey emérito no venía a Palma en Pascua y la atención mediática estaba más focalizada en él, aunque el enfado de las Reinas le quitó todo el protagonismo. Contribuyó también el gesto de la princesa Leonor apartando el brazo de su abuela hasta en dos ocasiones.
Las imágenes fueron analizadas y analizadas en las televisiones, incluso para saber qué le decía la Reina a doña Sofía. Y lejos de quedar ahí el enfado continuó ya fuera de la Catedral y ante todos los presentes. La reina Sofía besó a Leonor en la frente y, según se refleja en las imágenes, la reina Letizia le 'borra' el beso.
La Casa Real no quiso manifestarse al respecto y optó por rebajar públicamente la tensión, a modo de 'aquí no ha pasado nada'. Y así se escenificó días después con la visita a don Juan Carlos al hospital tras ser operado de su rodilla derecha o, tiempo después, con los paseos por Palma juntas con las niñas visitando los mercados.