Hemos querido saber más de Auba Estela Murillo, la mallorquina que está causando sensación en La Voz, programa que emite los lunes y martes Antena 3. Tres de los cuatro coaches del programa se disputaron a Auba; incluso, uno de ellos, Luis Fonsi, bloqueó a otro, Antonio Orozco, para impedirle que se diera la vuelta sentado en su sillón. Pero, al final, la joven de Sant Jordi se decidió por Pablo López. Pero, como por norma del programa los concursantes no pueden hacer declaraciones, hemos tenido que recurrir a amigos y familiares para conocer a Auba un poco mejor. Así que nos pusimos en ello.
Auba, aunque nació en Calvià, vive en Sant Jordi desde siempre. Y vive con sus abuelos, a quienes llama papás. No hemos querido profundizar en por qué no vive con sus padres, más que nada por respeto y porque nos han contado que no le gusta tocar ese tema.
En la actualidad, Auba estudia segundo de Bachillerato en el IES Joan Maria Thomàs. Este año repite curso. Todos están de acuerdo en una cosa, en que Auba es una luchadora.
Tiene un problema de salud un tanto complicado, no porque no esté controlado, que lo está, sino por la atención que requiere. Padece esclerosis múltiple remitente recidivante. No tiene cura y afecta al cerebro –ya que deteriora la mielina de éste– y se manifiesta con hormigueo. También se le puede quedar dormido medio cuerpo, lo que la obliga a inyectarse cada dos semanas.
Por eso, dicen, y también lo dice ella, que en la música y en el deporte ha encontrado un salvavidas, una distracción, un revulsivo, aparte de que es una joven muy positiva y luchadora, lo cual la convierte en una buena superviviente.
Toca piano y guitarra, aunque lo hace de oído, lejos de las partituras. Y, ayudándose de ambos instrumentos, compone canciones. No muchas, pero está en ello. Y tampoco dispone de mucho tiempo. Y cuando lo tiene, éste tiene que jugar a su favor; es decir, se ha de sentir inspirada, que no siempre ocurre. Pero, pese a ello, no nos extrañe que pronto la escuchemos cantar un tema, o temas propios pues, como decimos, en ello está. ¿Que en qué se inspira? Sin duda, de las cosas que la rodean.
Además de la música, le gusta el deporte, que también es otra válvula de escape. Una amiga nos comenta que juega de portero, y que lo hace por dos motivos: porque no le gusta correr y porque Iker Casillas fue su ídolo. Ha jugado en el Sant Jordi, s'Arenal y ahora milita en el San Pedro.
Volviendo a La Voz, Auba contó a su entorno más próximo que se apuntó al programa por probar, sin pensar en ningún momento que a estas alturas podría llegar a donde está. Presentó un vídeo en el que ella cantaba; luego, acudió al casting personal, en el que cantó dos canciones que eligió ella, más otra que le impuso el jurado y, superado éste, pasó al casting final, cantando otras dos canciones, esta vez acompañada al piano. Tras pasar la audición a ciegas, confesó que se había decidido por Pablo López por ser el que va más con su estilo y porque es una persona de gran corazón y sensibilidad.