El barco de la ONG alemana Sea-Eye Professor Albrecht Penck se llama desde este domingo Alan Kurdi, el niño de origen kurdo que se ahogó en septiembre 2015 en aguas turcas y cuya foto ya fallecido, boca abajo en la playa, recorrió el mundo y se convirtió en símbolo de la crisis humanitaria de los refugiados.
El puerto de Palma ha acogido este domingo la ceremonia del nuevo bautizo del barco de esta ONG fundada en otoño de 2015 por el alemán Michael Buschheuer y algunos amigos, poco después de que el pequeño de 3 años pereciera ahogado junto a su hermano de 5 y su madre en un fallido intento por escapar de la guerra de Siria vía marítima en un bote hinchable. El único miembro de la familia que sobrevivió fue el padre.
La ceremonia se ha celebrado con ocasión de una escala en el puerto de Palma de este barco que se dedica a salvar a inmigrantes en el Mediterráneo y a la misma han asistido el padre del niño, Abdullah Kurdi, y su tía Fatima Kurdi.
Previamente, la ONG pidió permiso a la familia para que el barco llevara el nombre de Alan, a lo que accedieron, al igual que a su presencia este domingo en el puerto de Palma.
El padre de Alan, muy emocionado, ha expresado su satisfacción de que este barco de rescate de personas lleve el nombre de su hijo y ha mantenido que las imágenes del pequeño en la playa, sobre la arena y en las manos de un policía turco, nunca deben ser olvidadas.
Además, ha dicho, la muerte de sus dos hijos y de su mujer en el mar es compartida por miles de familias que han perdido a seres queridos trágicamente en sus viajes para tratar de escapar de la guerra o del hambre.
Alan Kurdi, su hermano y su madre fueron enterrados en Kobane, ciudad turca en el norte de Siria pocos días después de que perdieran la vida. El acto de hoy ha contado también con la presencia de la consellera balear de Asuntos Sociales, Fina Santiago, y el obispo de Mallorca, Sebastià Tartavull.
Desde el año 2016, los barcos de esta ONG y sus cientos de voluntarios han rescatado a unas 14.000 personas en las 60 misiones que han llevado a cabo en el Mediterráneo, ha explicado esta organización humanitaria en un comunicado.