Un cura de la localidad alemana de Ballenstedt ha sido cesado este miércoles tras reconocer que gastó 120.000 euros procedentes de fondos parroquiales en una lotería fraudulenta por Internet.
«Me dejé engañar por estafadores en Internet. Me dejé convencer y les transferí dinero en varias ocasiones», reza la declaración del religioso, de 64 años, que se entregó ante la Policía por un delito de fraude y confesó ante el obispo Gerhard Feige.
El cura ha presentado su dimisión poco después de una reunión a la que han asistido 50 miembros de la parroquia afectada. El obispo ha aceptado este miércoles esta renuncia, según ha informado la diócesis de Magdeburgo.