La patinadora canadiense Meagan Duhamel no se irá de vacío de los Juegos invernales de PyeongChang. A sus medallas de oro y bronce en la disciplina de patinaje artístico ha de sumarles un nuevo compañero animal, un perro que la deportista ícono del equipo nacional salvó de ser servido como comida.
Los titulares añaden a la faceta deportiva de Duhamel su vertiente activista y comprometida con el veganismo y los derechos de los animales, en un país, Corea del Sur, donde la industria alimenticia de la carne de perro tiene un peso específico a tener en cuenta.
Mientras dura la cita olímpica las autoridades del país asiático han decidido arrinconar la promoción de los platos servidos con carne de can, por el choque cultural evidente con los ciudadanos extranjeros.
Duhamel, quien a bautizado al cachorro rescatado como Mootae, ha compartido en las redes sociales su agradecimiento a los medios de comunicación de todo el mundo que en estos días se están haciendo eco de su acción.
En Instagram la patinadora publicó una imagen del perro junto a su 'hermano' Theo, que también fue rescatado en su momento, y que ahora viajará hasta su país de origen para ser adoptado por una familia y poder vivir una vida plena, gracias a la segunda oportunidad que le dio la campeona olímpica.