La explanada del Parc de la Mar vivió este viernes su velada más infernal con la celebración de un multitudinario Correfoc que llenó el lugar de fuego, música, baile y ruido, mucho ruido. Todos estos elementos se vieron acrecentados debido a que en esta edición fueron siete las colles participantes. Como se encargó de destacar el presidente de la Federació d'Associacions de Veïns de Palma, Joan Frontera, «es la primera vez en que salen todas las agrupaciones de Palma».
El Correfoc comenzó pasadas las 22.30 horas, tras una primera batucada que se hizo un tanto larga. Por sa Portella aparecieron dos monstruos expulsando fuego, uno de ellos el Drac de na Coca, y, acto seguido, los dimonis invadieron el territorio abriéndose paso entre la gente al ritmo de sus bailes y ‘armados' con artefactos pirotécnicos que asustaban y encandilaban a partes iguales.
Además de las siete colles de dimonis y las dos bestias, en este espectacular Correfoc tomaron parte 362 dimonis, de los que 220 estaban preparados para quemar, 90 eran timbaleros y miembros de las batucadas y 52 personas actuaron dentro del equipo de apoyo. En total, hubo 4.435 unidades pirotécnicas, por las 3.300 del pasado año, así como 129,44 kilos de materia pirotécnica reglamentada.