Han sido, posiblemente, las dos First Dates, cuanto menos, más interesantes que hemos visto hasta la fecha. En la noche de este lunes, dos chicas de Campos, Jessi y Elisabeth, hermanas mellizas, de 18 años, transexual y asexual, respectivamente, acudieron al programa en busca, sino del amor, sí de la comprensión. Les acompañó su padre, Félix, que las apoya en todo. Posiblemente, sus abuelos y muchos de sus familiares y amigos se enteraronn de su orientación sexual a lo largo de la emisión del programa. Las dos hermanas expusieron sin tapujos lo que para muchos podría ser un problema; pero ellas lo ven como lo más normal. Lo afrontan con naturalidad.
Jessi, que rechaza el término bisexual siempre que se lo apliquen a ella, confesó que a los 11 años se sentía chico; sin embargo, notaba que se le empezaban a desarrollar los pechos, lo cual «hacía que no me sintiera a gusto». Tampoco entiende que «si te sientes chico, los trámites psicológicos se prolonguen tanto tiempo». Por su parte, Elisabeth tampoco oculta su condición de asexual. Es más, la explica: «No siento interés por el sexo... Podría hacerlo, pero no me interesa».
Sobera instaló a las hermanas en mesas separadas, pero a la vista. A Jessica la sentó en el altillo del comedor, mientras que Elisabeth se quedó en la parte baja, pero a no muchos metros de su melliza, a la espera de que llegaran sus parejas. Elisabeth recibió en su mesa a Danii, nacido en Rusia pero residente en un pueblo de Almería. Tras confesarle que es asexual, le dijo: «Me gusta más jugar a la Play que hacerlo... Es más divertido». Y el chico, que se declaró heterosexual, le contestó que la entendía. «Veo que te interesa más la persona –le dice–. A mí también. A veces, los amigos me dicen que me vaya de marcha con ellos, pero, si no me apetece, me quedo en casa, viendo la tele».
Jessi conoció a Daniel, que le aconsejó y al mismo tiempo la animó. «Sé tú siempre», le dijo. Luego le reveló que es argentino, que tiene 20 años, que nació niña, pero llegó un momento en que se dio cuenta que vive en cuerpo equivocado y... «pues que desde hace seis meses he comenzado el tratamiento», pero que todavía no se ha operado. Le dijo también que el apoyo por parte de la familia es importante.En la decisión final, Danii le dijo a Elisabeth que estaría encantado con una segunda cita. Ésta, tras recordarle que la distancia entre Almería y Mallorca es grande, queda como amiga, sin cerrar ninguna puerta. «Algún día vendré a verte a Mallorca», le dijo él. Ella sonrió. En cambio, Jessica y Daniel quedaron para una segunda cita. Necesitan seguir hablando. Ella, por lo que parece, encontró en él un buen apoyo.