En la historia marítima han acontecido accidentes cuya espectacularidad les ha otorgado un lugar prominente. Uno de ellos fue el naufragio del trasatlántico italiano Andrea Doria, causado por el abordaje del trasatlántico sueco Stockholm frente a la costa de Nueva York. De aquel suceso se han cumplido este verano 60 años. Era el 25 de julio de 1956 cuando la reforzada proa del ‘liner' escandinavo penetraba hasta 18 metros en el casco del flamante buque insignia de la naviera Italia Navigazione. Como resultado del fatal accidente fallecieron 46 pasajeros del buque transalpino y cinco personas del sueco.
Este célebre suceso recobró vida este lunes con la presencia en Palma del Astoria, nombre adoptado en la actualidad por el antiguo Stockholm. El actual Astoria cuenta con un largo historial marinero desde su primer viaje en 1948. La naviera sueca Svenska Amerika Linje se desprendió de él en 1960, cuando fue adquirido por la Alemania Oriental. En 1989, fue adquirido por intereses italianos, renació transformado en buque de cruceros tras una reforma integral. En 2005 fue rebautizado con el nombre de Athena y adquirió su actual bandera portuguesa.
En la actualidad, está siendo operado por la firma Cruise & Maritime Voyages. Hoy en día es el trasatlántico de cruceros más antiguo del mundo en servicio, solamente superado por el velero Sea Cloud, de 1931. En su dilatada vida marinera ha portado hasta once nombres distintos. El Astoria llegó este lunes a Palma con unos 500 pasajeros procedente de Marsella y zarpó rumbo a Ciutadella.