El rollerski es esquí sobre asfalto. Es un deporte muy completo ya que cuando se practica se mueven todos los músculos del cuerpo. Ha sido importado de los países escandinavos e inventado por los esquiadores de fondo de aquellas latitudes para mantenerse en forma durante el verano, en que lógicamente se quedan sin nieve.
Este deporte ha llegado a Mallorca, aunque, de momento, lo practica poca gente. Se espera que cada vez gane más adeptos, básicamente por tres aspectos: por lo completo que es, porque se practica al aire libre y por los paisajes diferentes que te permite ver.
El único inconveniente que tiene es que el rollerski no es barato y todo el material cuesta en torno a unos 300 euros entre los esquíes, la fijación para la bota, las botas y los palos.
Manu Rullán, de Sóller, es entrenador de rollerski. «Me interesé por él a raíz de haber estado estudiando INEF de Lleida, donde a falta de nieve se practicaba este deporte y, como me gustó, lo seguí practicando en Mallorca, donde cada verano llegan muchos esquiadores de fondo noruegos o suecos a practicarlo para mantener la forma de cara a la próxima temporada de esquí en sus países».
Manu suele dar clases unas dos o tres veces por semana en distintos puntos de la Isla. Él le saca un doble rendimiento al rollerski: enseña y se ejercita, con lo que adquiere fondo, que luego utiliza para las carreras de montaña en las que participa.
Carreteres del Consell no lo recomienda
Por su parte, desde Infraestructuras y Movilidad del Consell han apuntado a través de su perfil de Twitter que no recomiendan el rollerski.
«Es una práctica que pone en peligro a todos los usuarios de la carretera. Además, los usuarios del rollerski están considerados peatones. Por tanto, deben cumplir todas las condiciones como, por ejemplo, ir por el arcén».