El programa de la televisión autonómica catalana El gran dictat vivió hace unos días uno de los momentos más emotivos de sus más de siete años de historia al proclamarse ganador Julian Brock, un alemán que aprendió la lengua catalana a distancia.
Julian tan solo ha estado durante algunos meses en Lleida, donde estudió un Erasmus, aunque rápidamente se nota su pasión por las lenguas románicas.
De hecho actualmente estudia historia y filología hispánicas. Sin embargo, su predilección por el idioma y la cultura catalana es destacada, hasta el punto de confesarse «catalanísimo» y un enamorado de Catalunya y su gente.
Ello le permitió triunfar en este espacio televisivo que, presentado por Òscar Dalmau, combina las pruebas de conocimientos lingüísticos desde un punto de vista ameno y de entretenimiento.
La emoción con que celebró su victoria se convirtió en un fenómeno viral, con más de un millón de reproducciones en redes sociales y miles de reacciones de usuarios, entre ellas, la de la comunidad 'Mallorquins', que aglutina a más de 22.000 seguidores.
«Hay quienes dicen que con dos años no basta ni para aprender un mínimo. O los hay que con treinta años aquí aún no sueltan ni un 'bon dia'. Se necesita voluntad y que los mallorquines les animemos a que lo hagan», afirmaron desde este sector, popular por ofrecer «argumentos a los mallorquine