Guido Menzio, profesor de Economía de la Universidad de Pensilvania, fue confundido por un terrorista en un vuelo el pasado jueves desde Filadelfia a Siracusa.
El profesor aprovechó los minutos previos al despegue para realizar algunos ejercicios de economía. La pasajera que sentaba a su lado empezó a sospechar de él, llamó a la azafata y le dio una nota donde le decía que su compañero de butaca podría ser un terrorista.
La azafata regresó y, con una excusa, hizo abandonar el asiento a la pasajera. El avión no despegó y regresó a la puerta de embarque. El piloto salió de la cabina y se dirigió hacia el profesor economista, le pidió que le acompañase y así lo hizo. A la salida del avión un hombre interrogó al profesor y le explicó que su compañera de asiento pensaba que podría ser un terrorista a causa de las notas que él estaba escribiendo. Menzio se echó a reír y explicó que es economista y que estaba realizando unos ejercicios. Para demostrarlo, le mostró el bloc de notas.
Todo quedó en un malentendido y tras hora y media de retraso el avión despegó.
Redes sociales
Menzio escribió un post en su cuenta de Facebook explicando esta desagradable experiencia. «Puede ser un poco gracioso y un poco preocupante. La señora me miró, miró a la misteriosa fórmula que había escrito y sacó la conclusión de que yo no era del todo bueno. Por ello, el vuelo fue retrasado una hora y media», explica el economista.
Una captura de pantalla de su publicación fue compartida el 7 de mayo en Twitter por Susan Dynarski, también profesora en la Universidad de Michigan, y desde ahí ha sido retuiteada por más de 4.000 personas.