La dirección general de Instituciones Penitenciarias ha trasladado de la cárcel de mujeres de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) a otras prisiones a tres presas al considerar que presionaban a otras reclusas para que se sumaran a las denuncias de trato de favor en la prisión con la tonadillera Isabel Pantoja.
Fuentes penitenciarias han explicado que el traslado de las internas se decidió tras el «enfrentamiento» que mantuvieron con los educadores de la cárcel, que intervinieron ante los problemas que estaban surgiendo entre las internas de la prisión, donde Pantoja cumple una condena de dos años por blanqueo de capitales.
Según las mismas fuentes, en la reunión de las internas que recababan apoyos para denunciar trato de favor hacia la cantante, lo que Instituciones Penitenciarias ha negado «rotundamente», hubo gritos y conatos de violencia, por lo que intervinieron los educadores.
La decisión de trasladarlas se argumenta en «desconsideraciones graves» hacia mandos de la prisión y funcionarios, por el intento de divulgación de «datos falsos» sobre supuesto trato de favor a Pantoja y por las presiones ejercidas sobre compañeras del centro penitenciario, han añadido las fuentes.
Una cuarta interna también habría participado en los incidentes, aunque no fue trasladada a ninguna prisión porque fue excarcelada tras cumplir su condena, han indicado las fuentes, que consideran «normal» la decisión adoptada cuando se producen este tipo de hechos.
El incidente ocurrió el día 9 de julio y se sumó al que se produjo el 24 de junio, cuando una interna lideró un aplauso durante la comida en apoyo a los funcionarios que criticaron los supuestos tratos de favor hacia Pantoja.
El traslado de las presas se ha conocido después de que El País adelantara hoy que la interna Cristinela G.S. fue trasladada a la cárcel de El Puerto de Santa María (Cádiz) tras un informe de un educador de la prisión en el que resaltó el liderazgo que jugó la presa en el aplauso a 56 funcionarios.
«Dicha interna fue la que enardeció al resto de la población a que aplaudieran y vitorearan en el comedor», recoge este texto, que esgrime la actitud «desafiante y agresiva» de la reclusa, añade el periódico.
Otras fuentes han explicado a Efe que lo ocurrido con los presuntos tratos de favor a Pantoja se derivan de la denuncia que investiga un juzgado sobre supuestas solicitudes de índole sexual que habría hecho un funcionario de la cárcel sevillana a cinco internas a cambio de protección.
Este funcionario, que está acusado por la Fiscalía, ha sido suspendido de empleo y sueldo, y las internas que le denunciaron han mantenido su versión ante la juez que instruye el caso.
Esas fuentes sostienen que este funcionario y un grupo de compañeros habrían liderado las denuncias de trato de favor de la prisión hacia Pantoja como forma de atacar a la dirección del centro penitenciario.
Los inspectores de Instituciones Penitenciarias, por su parte, han acreditado que, frente a las denuncias de trato de favor, no ha quedado demostrado, por ejemplo, que Pantoja desayunara en el economato de la cárcel con la directora del centro, María Isabel Cabello, y el subdirector de Seguridad momentos antes de salir el 1 de junio de permiso penitenciario.