La Fiscalía ha archivado la denuncia contra el diputado de ERC en el Congreso Joan Tardà por presuntas injurias y amenazas al Rey y al Tribunal Constitucional (TC), después de que cerrara un acto público en diciembre al grito de «muera el Borbón» y calificara de «corrupto» al TC, y a la Constitución Española de «infamia».
El sindicato Manos Limpias denunció el caso ante la Fiscalía General del Estado, y la fiscal superior de Catalunya, Teresa Compte, ha decidido archivar ahora la denuncia porque no ve delito en las declaraciones del diputado republicano, «al margen de las formas más o menos acertadas en el lenguaje utilizado».
El dirigente de ERC pronunció su discurso el 6 de diciembre, Día de la Constitución, durante un acto de las juventudes de ERC (JERC) en Barcelona, y provocó una polémica sobre la intencionalidad de sus palabras. Tras recibir la denuncia, la Fiscalía pidió a los Mossos d'Esquadra que le informaran sobre las palabras exactas y el contexto en que las dijo.
En su escrito, la fiscal enmarca las declaraciones de Tardà en un contexto «no habitual», ya que se hicieron tras una «performance» en la plaza dels Àngels del Raval de Barcelona, sin presencia institucional y sin ser un acto «sereno y meditado» y sin «solemnidad».
Compte adjunta en su argumentación dos intervenciones posteriores de Tardà en las que justificaba su expresión recordando que se trata de una referencia a la dinastía borbónica que ya se utilizaba en el siglo XVIII, y la calificación de «corrupto» del TC por su división y deslegitimación al juzgar el Estatut.
Respecto a la ofensa a la Constitución, la Fiscalía considera que la Carta Magna «ni prohíbe el cuestionamiento de la monarquía parlamentaria, ni su reforma por vías legítimas».
Según la Fiscalía, en las palabras de Tardà no había 'animus iniurandi', y tampoco se puede confundir este precepto legal con la «mayor o menor habilidad dialéctica» del diputado y su «peculiar pedagogía democrática».
De hecho, admite que nada en el discurso de Tardà animaba a los presentes a «perpetrar un magnicidio» contra el Rey, ni iba acompañado de gestos o exclamaciones.
Manos Limpias había calificado las palabras de Tardà como uno de los «hechos más graves de la democracia» y de «ofensa a los ciudadanos» dado que la Constitución «pertenece a todos».
El sindicato considera que cometió los citados delitos con el agravante de la utilización de su calidad de diputado, con publicidad y bajo el amparo de la formación a la que pertenece.
Además, Manos Limpias dijo que Tardà es «reincidente» dado que ya participó en una manifestación no autorizada con el lema 'Ultrajemos a España, desobediencia a la imposición española'.