Los casos de enfermos de cólera en Zimbabue ya superan la cifra de los 60.000, según alertó la Organización Mundial de la Salud (OMS), que calificó la situación como el «peor escenario» de esta enfermedad desde que surgió el brote el pasado verano.
De los afectados, más de 3.100 ya han fallecido por el brote que hizo su aparición el pasado agosto y que ha afectado sobre todo a las ciudades, donde se acumulan las aguas residuales, principal causa del contagio.
Por otro lado, el líder opositor Morgan Tsvangirai anunció que su partido, el Movimiento por el Cambio Democrático (MDC), formará parte del Gobierno de unidad zimbabuense mano a mano con el ZANU-PF, el grupo político liderado por el presidente Robert Mugabe. Con esta medida, pretenden poner fin a la crisis política iniciada el pasado verano tras las polémicas elecciones presidenciales.
El brote más mortífero ocurrido en el continente africano en 15 años no muestra ningún signo de retroceso, ya que en las últimas 24 horas se han descubierto 1.493 nuevos casos y 69 muertes, según las últimas cifras de la OMS, que calificó la situación como el «peor escenario» de esta enfermedad en Àfrica.
Las fuertes lluvias y las celebraciones del fin de año, cuando muchos habitantes de las ciudades han viajado a las provincias a ver a los familiares, han contribuido a la propagación de la enfermedad.
Sin control
«La epidemia está realmente presente en las provincias, salta de una zona a otra», dijo Claire-Lise Chaignat, coordinadora global de la OMS para el cólera. «Está fuera de control, porque es difícil prever qué es lo que va a ocurrir», añadió.
Por ese motivo, desde la OMS exigen que se tomen medidas drásticas e inmediatas, aunque en la Organización son conscientes de que las cosas van a «continuar como hasta ahora», según confirmó Chaignat.
Por otro lado, el líder opositor Morgan Tsvangirai anunció ayer que su partido, el Movimiento por el Cambio Democrático (MDC), formará parte del Gobierno de unidad zimbabuense mano a mano con el ZANU-PF, el grupo político liderado por el presidente Robert Mugabe, en una decisión que puede poner fin a la crisis política iniciada el pasado verano tras las polémicas elecciones presidenciales.
En virtud del acuerdo político entre ambos partidos y auspiciado por Sudáfrica, el líder opositor formará parte del nuevo Gobierno de unidad como primer ministro del país a partir del próximo día 11 de febrero, cuando tome posesión del cargo.