El ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, mostró ayer su confianza en que el año 2007 pueda terminar con menos de 3.000 personas muertas en accidentes de tráfico y recordó que al comienzo de la presente Legislatura los fallecimientos anuales en las carreteras eran algo más de 4.000.
«Es un dato que marca la tónica del año y de la Legislatura porque hemos bajando, mes a mes, año a año, y creo que acabaremos el año con menos de 3.000», apuntó el ministro tras visitar hoy en la localidad leonesa de Santovenia de la Valdoncina las obras del Centro Estatal de Tramitación de Denuncias (Estrada) que se ubica en el Polígono Industrial de Onzonilla.
En este contexto, remarcó que la velocidad es «el factor más negativo» de los accidentes ocurridos en las carreteras españolas. «Hemos comprobado en estos últimos años que nuestros conductores, aunque no todos, van más deprisa de lo razonable», apostilló y posteriormente precisó que en los primeros 25 días del mes de diciembre, en comparación con el mismo periodo en 2006, se registraron unos nueve fallecidos menos, lo que supone «casi» un cinco por ciento menos.