M.GARCIAS
«Escribo libros sobre lo que el cine ha aportado al siglo XX», explicó Gabriel Genovart, autor de El somni de l'Oest, quien, tras una atareada semana de presentaciones y entrevistas, anticipó que «mi próximo libro tratará de la infancia y el cine en la época de la posguerra española».
El somni de l'Oest, publicado por la revista de la Fundació Sa Nostra Temps Moderns, recoge dos ideas fundamentales: los símbolos del género cinematográfico del western norteamericano entendidos como arquetipos del inconsciente colectivo, véase el río, el desierto, la montaña, el valle o el viaje; y la relación de éstos símbolos universales con el cambio urbanístico que ha sufrido la Isla. El símbolo que enlaza estas dos ideas es el tesoro.
«La búsqueda del oro se convierte en un viaje donde el nuevo territorio es el lugar en el que trasladar las utopías», explicó Genovart, y añadió que «el oro ciega y separa al hombre de su meta, el oro es la representación ideal del viaje iniciático y está marcado por un paralelismo simbolista entre la búsqueda material y la espiritual». El Salón de Juventud, el Teatre Principal d'Artà y el Oasis Cinema fueron los lugares donde el niño Genovart vió: «El fin de mi infancia, el declive del western y la Mallorca preturística, que coincidieron temporalmente». «Es absolutamente un libro melancólico y autobiográfico, en el que el recuerdo de la infancia perdida se convierte en positivo a través del camino espiritual». El escritor respondió respecto a la simbología de El Dorado que «las utopías no se encuentran nunca del todo, es cuestión de equilibrio interior». La publicación ha sido entendida por Antoni Figuera, autor del prólogo, como continuación de la primera obra de Gabriel Genovart, La placenta dels somnis.