El Instituto Nacional de Consumo comenzó ayer la primera fase de un estudio antropométrico que servirá para conocer la talla media de las mujeres españolas y homogeneizar el tallaje de las prendas de vestir y promover una imagen saludable.
En esta primera fase, 300 mujeres de Madrid, Tarancón (Cuenca) y Qartell (Valencia), por ese orden, y que han sido elegidas aleatoriamente, se someterán a un estudio antropométrico que será realizado por personal del Instituto Biomecánico de Valencia, la empresa ganadora del concurso realizado para hacer este estudio.
En la presentación de esta experiencia piloto, la directora general de Consumo, Angeles Heras, explicó a los periodistas que los resultados del estudio se conocerán a finales de la primavera y serán analizados en la Comisión de Seguimiento del Ministerio de Sanidad y Consumo con el sector de la moda.
Estos resultados mostrarán cuáles son las dimensiones corporales y la forma del cuerpo de las mujeres españolas, según su edad, y servirán para definir patrones estándar y redefinir el tallaje de la ropa en las tiendas españolas para adecuarlo a la realidad de las mujeres, explicó Heras.A partir de ahí, el estudio se extenderá al resto de España, durará un año, y se realizará a 8.500 mujeres de entre 12 y 70 años, que serán seleccionadas aleatoriamente en toda España y que, a través de una carta firmada por la ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, serán invitadas a formar parte del estudio.
Las mujeres que accedan a formar parte de esta experiencia tendrán tres cabinas distribuidas en las 60 localidades elegidas para el muestreo, y recibirán a cambio un obsequio.
El estudio antropométrico se realiza con una cabina de 2x2 metros de base y 3 de altura en la que un láser vertical efectúa 130 mediciones en 30 segundos de las que se obtienen imágenes en tres dimensiones, longitudinales y perimetrales del cuerpo completo.
Al mismo tiempo, una báscula situada en la base de la cabina pesa a la mujer que se somete al estudio.
Por último, el personal del Instituto de Biomecánica de Valencia realiza unas pruebas de medición de los pliegues cutáneos para conocer el grado de grasa acumulada bajo la piel.
Las reacciones no se han hecho esperar. El diseñador orensano Adolfo Domínguez aludió ayer a la posible unificación de tallaje en las prendas de ropa para señalar que no será fácil «porque realmente las medidas ya son estandarizadas y sólo hay que cambiar el nombre de la talla y no será útil porque el estilo permanecerá diferente«. Domínguez inauguró en la capital orensana la primera tienda gallega de su empresa destinada específicamente a ropa de tallas grandes.