Varios sindicatos pidieron ayer a las administraciones medidas para garantizar la protección de los docentes en los colegios, en coincidencia con la concentración convocada ayer en Barcelona tras el episodio de violencia escolar hace unos días en un colegio de la capital catalana.
Representantes de CSI-CSIF, ANPE, CCOO y UGT reiteraron su apoyo a la protesta convocada ayer por la tarde por la escuela Eduard Marquina, en la que recientemente se produjo una agresión verbal y física de una familia al equipo directivo del centro, profesorado y conserje.
El responsable de Educación de CSI-CSIF, Eliseo Moreno, señaló que los hechos que se están registrando «están dando la razón a los sindicatos» que, en un principio, fueron acusados de «alarmistas» al denunciar la conflictividad en los colegios.
El portavoz de CSI-CSIF solicitó medidas a la Administración para atajar, no sólo los casos de alta conflictividad escolar, sino también los «menos llamativos».Advirtió de que el insulto y la actitud de desobediencia de los alumnos suelen ser origen de situaciones que acaban por «destruir» a los docentes, que «se sienten más solos».
El presidente de ANPE-Cataluña, Ferrán Barri, denunció a Efe el aumento de la conflictividad escolar en los últimos «tres o cuatro años», debido en parte, dijo, a «la excesiva permisividad» de las familias ante «conductas descompensadas» de los alumnos.