El gasto en alimentación realizado en los hogares españoles en los seis primeros meses del año ascendió a 29.083 millones de euros, una cifra que representa un incremento del 6% respecto al mismo periodo del año anterior, según los datos del Panel de Consumo elaborado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA). El vino de calidad y las cerveza fueron los dos productos que presentaron un mayor incremento en su consumo, mientras que el aceite de oliva y la leche líquida fueron los que más descendieron.
El vino de calidad volvió a ser un año más el producto que mayor incremento registró en el consumo de las familias españolas, al crecer casi un 8% hasta los 55 millones de litros. Según el MAPA, este incremento se produjo en los hogares en los que no hay niños, entre los que destacan aquellos de parejas de jóvenes y adultos.
A pesar de ser los hogares de retirados un grupo importante para el mercado del vino, no se incrementó su consumo en el vino de calidad, sin embargo, están intensificando su consumo de bebidas refrescantes en mayor medida que la media.Muy de cerca le sigue la cerveza, que registró un incremento del 7%, debido principalmente a la cerveza sin alcohol. El consumo de esta bebida no se incrementó en los hogares con niños ni en las parejas de adultos, mientras que en el resto de domicilios se intensificó la compra de cervezas tanto con como sin alcohol. En el sector de las bebidas, la presencia de niños influye directamente en el crecimiento o decrecimiento de los mercados.
También han sido importantes los aumentos de consumo de las aguas minerales y las bebidas refrescantes situándose en torno al 6%, hasta alcanzar los 1.100 y 879 millones de litros, respectivamente.
Entre los incrementos más destacables se encuentra el observado en las frutas y hortalizas frescas, que aumentaron un 4% con respecto al mismo periodo de 2005 y alcanzaron cerca de 2.000 millones de kilos comprados de frutas y 1.200 millones de hortalizas frescas.
Según el MAPA, ambas categorías también están experimentando aumentos continuos de consumo en los últimos años. En el primer caso, cabe destacar el incremento de consumo en las parejas jóvenes, tanto con hijos como sin hijo pequeños, mientras que en la segunda categoría son los hogares de retirados los que han impulsado su crecimiento.
Los datos del MAPA reflejan que durante los seis primeros meses del año el mayor descenso se produjo en el consumo de aceite de oliva que se situó en 200 millones de litros comprados, lo que supone un descenso del 6,4% con respecto al mismo periodo del año anterior, siendo mayor el correspondiente al aceite de oliva que al de oliva virgen. La mayor bajada se produce en los hogares de jóvenes, sustituyendo su consumo por el de girasol, sensiblemente más barato. Cabe destacar el mantenimiento de su consumo en los hogares con niños pequeños y de retirados, por resultar este producto muy beneficioso para la salud.
Otro producto cuyo consumo descendió fue la leche líquida, que con 1.830 millones de litros bajó un 4,5% respecto a 2005. En el conjunto de los hogares, la encuesta del MAPA observa que se está sustituyendo el consumo de leche por derivados lácteos, desviándose una importante cantidad hacia los productos novedosos.