Los primeros resultados del macroestudio español sobre Prevención de la Dieta Mediterránea (Predimed), presentados ayer en Madrid, revelan que una alimentación basada en pescados, frutas, verduras, trigo y lácteos y suplementada con aceite de oliva extra virgen y frutos secos -nueces, avellanas y almendras- disminuye entre un 40 y un 50% los factores del riesgo cardiovascular, ya a los tres meses de seguimiento.
Tras una primera evaluación del estudio, que ayer aparecía publicado en la revista «Annals of Internal Medicine» del American College of Physicians, el doctor Ramón Estruch, especialista de Medicina Interna del Hospital de Barcelona y coordinador del proyecto señaló que el estudio, «el primero que se realiza en prevención primaria del riesgo cardiovascular» revela que a los tres meses de dieta los pacientes incorporados en una primera etapa mostraban «una reducción significativa de los factores de riesgo cardiovascular»; resultados que apoyarían la hipótesis global del estudio orientada a demostrar que la dieta mediterránea suplementada con aceite de oliva extra virgen y frutos secos disminuye los episodios cardiovasculares (ictus, infarto de miocardio, etc) en personas con alto riesgo de padecer este tipo de enfermedades.
De hecho, según explicaron Estruch y Miquel Fiol, del Hospital de Son Dureta de Palma de Mallorca, los primeros resultados corresponden a 772 pacientes con una edad media de 70 años que presentaban, al menos, tres factores de riesgo cardiovascular (tabaco,27%; hipertensos 74%; diabetes 56%, colesterol LDL alto 60%; obesidad 87% y antecedentes familiares de episodios cardiovasculares 12%). Los participantes fueron divididos en tres grupos y sometidos a una dieta mediterránea con aceite de oliva en el primer caso, a una dieta mediterránea acompañada de frutos secos en un segundo caso y un tercer grupo siguió una dieta de control baja en grasas.