Los españoles cada vez somos más exigentes a la hora de consumir productos y servicios. El estudio elaborado por la revista 'Consumer' con los datos de los cinco últimos años, revela que a los consumidores nos preocupa mucho la alimentación y la salud. En cambio, y aunque no estamos satisfechos con la información que recibimos sobre los productos y servicios a consumir, no somos muy dados a reclamar. Eso sí, aunque sólo el 21 por ciento ha presentado una reclamación en el último año, el porcentaje casi se ha duplicado desde 2002.
En materia de alimentación, damos buena nota a los productos que consumimos, aunque se estanca la tendencia de aumento de esa confianza, que incluso bajó 0,04 puntos entre 2003 y 2005. Las dudas surgen en dos sectores: la comida rápida (cuya valoración sólo han mejorado una décima en el último lustro, del 3,3 al 3,4, un suspenso rotundo) y los alimentos transgénicos. Los restaurantes en general reciben una buena nota, un 6,6.
Valoramos en general las marcas de alimentación, y aumenta la buena apreciación de las marcas 'blancas', que ha subido de un 5,6 a un 6,1 en los últimos cinco años. Y en cuanto a los centros, a los españoles nos siguen gustando los mercados tradicionales y ultramarinos aunque cada vez se confía más en hipermercados y supermercados.Los alimentos ecológicos generan confianza en el consumidor, pero no terminamos de incorporarlas a nuestra dieta, ya que sólo el 44 por ciento afirma haber comprado alguno en el último año. El comercio justo tampoco parece calar entre los españoles, ya que la mayoría no sólo no compra estos productos sino que no sabe lo que son. Este dato entronca con la escasa afiliación a ONGs y a que la mayoría de los que sí tienen relación es sólo con aportaciones de dinero.