OTR/PRESS-ROMA
Víctor Emmanuel de Saboya, hijo del último rey de Italia, pasó ayer su primera noche en prisión después de ser detenido en el marco de una investigación abierta sobre proxenetismo y corrupción. Concretamente se le acusa de reclutar prostitutas para enviar a clientes del Casino Campione D'Italia, un enclave italiano en Suiza, y de corrupción en relación con certificados para videojuegos y máquinas tragaperras para instalar en locales de ocio.
La detención de Víctor Emmanuel fue ordenada por un juez del tribunal de Potenza, en el sur de Italia, en el marco de una investigación coordinada por Henry John Woodcock contra una organización entre los que hay miembros de la mafia siciliana. Los cargos que se le imputan están relacionados con la emisión de certificados para videojuegos y máquinas tragaperras y con la captación de prostitutas para el casino Campione D'Italia.
El jefe de la Casa de Saboya, de 69 años, fue arrestado ayer en la localidad de Varenna, a orillas del Lago Como, donde el príncipe de Saboya había acudido a comer. Por la mañana había estado en Lierna donando una campana con la efigie de la casa real. Victor Emmanuel fue trasladado a la prisión de Potenza en un coche con los cristales tapados con periódicos y está en una celda apartado del resto de los presos. Ahora está pendiente que pase a disposición del juez.