Un total de 153.285 hectáreas de superficie forestal han sido devastadas por el fuego durante lo que va de año, lo que supone un aumento del 26,5 por ciento respecto al pasado 2004, según los últimos datos del Ministerio de Medio Ambiente.
La superficie quemada este año supera todos los registros de los últimos diez años, excepto los registrados durante el año 2000, un ejercicio en el que ardieron -durante el mismo periodo- más de 161.647 hectáreas forestales.
Aunque las hectáreas arrasadas por el fuego fueron aquel año superiores a las registradas este año, el número de fuegos, tanto de conatos (aquellos en los que arde menos de una hectárea) como de incendios fue muy inferior.
Durante el presente año se han registrado 15.111 conatos, unos cuatro mil más que los que de media se produjeron durante los últimos diez años, y el número de incendios supera ya los 8.000, aproximadamente, unos 1.500 más que la media del último decenio.
Los últimos datos facilitados por el Ministerio de Medio Ambiente -que recopilan información hasta el 11 de septiembre- reflejan que la superficie arbolada que se ha perdido en los incendios que se han sucedo en lo que va de año en España se eleva a 66.054 hectáreas.
El fuego ha arrasado además 82.269 hectáreas de superficie de matorral y monte abierto, y la superficie de pastos y dehesas afectadas se eleva a un total de 4.601 hectáreas.Los datos reflejan que la superficie arbolada arrasada por el fuego (66.054 hectáreas) este año es la más alta de los últimos diez y duplica la media del decenio (31.097 hectáreas).
El mayor número de siniestros (63,24%) se ha producido en el noroeste peninsular (en las comunidades de Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco, y en las provincias de León y Zamora).