Estos son algunos de los datos ofrecidos ayer por el director general de Tráfico, Pere Navarro, quien aseguró que las infracciones especialmente graves, como el circular a 210 kilómetros por hora serán comunicadas al fiscal por las respectivas Jefaturas Provinciales de Tráfico, entendiendo que estas conductas pudieran ser constitutivas de delito o falta contra la seguridad vial.
«Tenemos la obligación de que si detectamos a una persona a 240 kilómetros por hora, nosotros hacemos un informe a la Fiscalía diciendo que para nosotros es una conducción absolutamente temeraria y puede ser, en nuestra opinión, que sea constitutiva de delito», indicó Navarro, quien añadió que en Tráfico no pensaban encontrarse con «estos delincuentes».
En concreto, los conductores infractores circulaban en los siguientes tramos de velocidad: 109.848 a más de 120 kilómetros por hora y de ellos 80.056 a más de 140, 23.049 a más de 160, 2.167 a más de 180, 191 a más 200, 27 a más de 220 y cinco a 240.En total, 933 vehículos han sido detectados por los diferentes radares tres o más veces; hay cuatro vehículos que a lo largo de este mes han sido detectados ocho veces con excesos de velocidad y cinco en siete ocasiones.
Todas las infracciones registradas desde el 1 de agosto darán lugar a la tramitación del correspondiente expediente sancionador, que en la mayoría de los casos ocasionarán multa de entre 300 y 600 euros y la suspensión del permiso para conducir por un periodo de entre uno y tres meses.
Navarro subrayó que cuando entre en vigor el sistema de permiso por puntos le supondría la pérdida de entre dos y seis, dependiendo del exceso cometido.
«No queremos sancionar, pedimos a la gente que adecúe a los límites máximos e insistimos en nuestro mensaje de que no corran, no vale la pena, las prisas matan y la velocidad no está de moda. Pero queremos avisar porque vamos a tener que suspender o retirar demasiados permisos de conducir, miles y miles de permisos de conducir, y pedimos ayuda a los ciudadanos para no tenerlo que hacer», comentó Navarro.