La secretaria Ejecutiva de Bienestar Social del PP, Ana Pastor, denunció que el proceso de normalización de inmigrantes, que concluye el sábado que viene, además de ser improvisado y totalmente diferente de lo se está haciendo en el resto de países de la UE, sólo está generando confusión y enfado en el colectivo. El PSOE cree no obstante que el único problema que se está produciendo en la materia está en la cabeza de los dirigentes del PP, «obsesionados con sembrar alarmismo».
En rueda de prensa tras reunirse con el Àrea de Inmigración del PP, Pastor acusó al Gobierno de hacer una política en materia de inmigración que «nada tiene que ver» con la del resto de los países de la Unión Europea (UE). Así, subrayó que el Gobierno no ha tomado medidas contra la inmigración ilegal, lo que la ha convertido en el segundo problema para los españoles. Pastor cree que las medidas emprendidas por el Gobierno son nefastas y que el proceso de regularización «está generando confusión y enfado» entre los inmigrantes. Así, advirtió que además de la confusión en Ayuntamientos y CC.AA. sobre los documentos para proceder a la regularización, se van a producir «inmigrantes de dos categorías, según se empadronen o no».
La dirigente popular aseguró además que la estrategia del Gobierno en este proceso de regularización es «incoherente porque demuestra desprecio absoluto» hacia los inmigrantes que se encuentran en España desde el 7 de agosto. Pastor advirtió además de que el próximo sábado se producirá «el colapso, aunque se alargue el horario y las oficinas sigan abiertas».
Frente a estas acusaciones, el portavoz de inmigración del PSOE en el Congreso de los Diputados, Antonio Hernando, subrayó que el «único problema» del proceso de regularización de inmigrantes, «está en la cabeza de los dirigentes del PP obsesionados con sembrar confusión y alarmismo», para intentar ocultar su éxito.
En un comunicado, Hernando explicó que el proceso, lejos de representar una regularización indiscriminada como la efectuada por Rajoy en 2001, «ha permitido aflorar cientos de miles de empleos irregulares y dar lugar a la misma cantidad de nuevos contribuyentes».