EFE-SEGOVIA
Al menos mil toneladas de piedra se desprendieron la pasada
madrugada sobre el santuario de la Fuencisla, patrona de Segovia,
del siglo XVII, y destrozaron parte del edificio anejo a la
iglesia, donde se encontraban cinco personas, tres de ellas
religiosas que han resultado heridas.
Una de las religiosas, monjas carmelitas de la Sagrada Familia, permaneció tres horas atrapada entre los escombros y finalmente fue rescatada con rotura de clavícula y trasladada al Hospital General de Segovia, junto a las otras dos, que sufren contusiones. El alcalde de Segovia, Pedro Arahuetes (PSOE), consideró «un milagro» que no haya muerto nadie y que no haya resultado afectada la iglesia, levantada entre los siglos XVI y XVII.
El suceso se registró sobre las dos de la madrugada cuando cientos de toneladas de rocas se desplomaron sobre la parte derecha del inmueble de tres plantas, antigua vivienda del capellán, construido en torno a la misma época que el templo y que ocupaban las tres monjas y un matrimonio de guardeses, que resultó ileso.
Fuentes de los Bomberos han indicado que el desprendimiento de las rocas pudo deberse al propio desgaste natural de la piedra y, aunque está pendiente de evaluación, se estima que podrían ser más de mil toneladas las caídas sobre el conjunto.