El Consejo de Ministros aprobó ayer, dentro de un paquete de 53 medidas para fomentar la igualdad entre mujeres y hombres, un programa de actuaciones e incentivos para aquellas empresas privadas que incorporen mujeres en sus órganos de dirección, según informó la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega.
«Hemos adoptado una serie de medidas preventivas para fomentar el empleo femenino, favoreciendo el aumento de la presencia de las mujeres en puestos de responsabilidad de los organismos públicas, concesión de microcréditos a mujeres emprendedoras y un programa de actuaciones e incentivos a empresas privadas que incorporen mujeres en los órganos directivos y consejos de administración», dijo.
En el contexto de la celebración el próximo martes, 8 de marzo, del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, Fernández de la Vega comentó que el Ejecutivo quiere fomentar la plena equiparación de derechos entre hombres y mujeres. Así, aseguró que se han dado «53 pasos» en favor de la igualdad en ámbitos tan diversos como, el empleo, las administraciones públicas, la investigación, la vida política, el deporte, la cultura o la violencia de género.Por su parte, el ministro Caldera destacó los tres niveles en los que hay que seguir promoviendo la igualdad: el empleo, la conciliación de la vida laboral y familiar y la lucha contra la violencia de género. «En estos tres ámbitos hemos puesto en marcha medidas pioneras y en algunos casos, únicas en el entorno europeo», se congratuló.
En la lucha contra la violencia de género, el Ejecutivo aprobó los reales decretos de creación y constitución de Juzgados de violencia contra la mujer y la creación de la Delegación Especial del Gobierno contra la violencia sobre la mujer, en desarrollo de la Ley Integral.
Como novedad, el ministro de Trabajo anunció la puesta en marcha de un Plan específico para la inserción laboral de las mujeres víctimas de violencia de género, previa concertación con las comunidades autónomas. En el ámbito del empleo, además, se reservan un 60 por ciento de las acciones del Plan Nacional de Acción para el Empleo para el colectivo femenino, lo que supondrá 1,05 millones de acciones en 2004. A su vez, se reservará al menos un 5 por ciento de puestos en ocupaciones públicas con baja representación femenina y se prevé extender, previo diálogo social, esta medida al ámbito privado.