La NASA anunció ayer que, tras cuatro años de procesamiento de datos transmitidos por el transbordador espacial «Endeavour», ha completado lo que se considera el mapa topográfico más completo de la Tierra.
Los datos que, según el anuncio de la agencia espacial podrían llenar la Biblioteca del Congreso de EEUU, incluyen el 80 por ciento del total de la masa terrestre. También revelan por primera vez grandes extensiones de la superficie del planeta que en otras misiones estaban cubiertas por las nubes.
«Esta ha sido una de las misiones científicas más importantes de los transbordadores y probablemente la más importante de carácter cartográfico que se haya realizado jamás», dijo Michael Kobrick, científico de la misión del «Endeavour».
El científico agregó que los datos proporcionados por el «Endeavour» cubren los territorios de Australia y Nueva Zelanda en un detalle sin precedente, además de más de mil islas de Polinesia y Melanesia en el Pacífico sur, así como islas del Índico y el Atlántico.Kobrick indicó que muchas de esas islas son de bajo nivel y muy vulnerables a los efectos de las marejadas y las tormentas y su conocimiento tal vez ayude a evitar catástrofes como la ocurrida a fines de año en el sudeste asiático.
«Conocer exactamente hacia dónde se van a dirigir las aguas es vital para mitigar los efectos de futuros desastres como el maremoto del océano Indico», manifestó.
Según John LaBrecque, director del Programa de Riesgos Naturales en la Tierra en la agencia espacial, los datos proporcionados por la misión del «Endeavour» tendrán una amplia variedad de usos.
Entre ellos incluyó la planificación sobre el uso de la tierra en todo el mundo hasta la exploración «virtual» del planeta.
«Con el tiempo, otras misiones (en el espacio) podrán utilizar la misma tecnología para detectar los cambios que se hayan producido en la superficie de la Tierra».