El uso de terapia hormonal sustitutiva (THS) en mujeres menopáusicas ha provocado en España unos 16.000 casos adicionales de cáncer de mama cada año, según denuncia en un informe la Fundació Institut Catalá de Farmacología.
El estudio dice además que otras 6.000 mujeres han sufrido ictus y 8.000 un tromboembolismo pulmonar por usar este fármaco sospechoso desde hace muchos años de graves efectos secundarios, a cambio de ahorrar 6.000 casos de cáncer colorectal y 500 fracturas de cuello de fémur, una situación que los autores califican de «trágica».
Según ha declarado a EFE el farmacólogo Joan Ramón Laporte, uno de los firmantes del trabajo, las cifras salen de extrapolar los datos de un metaanálisis de cuatro ensayos clínicos en los que se cuantifica el riesgo, y cifrando en 500.000 las usuarias españolas.
Para el farmacólogo, la gravedad de estos fármacos, sin pruebas claras de sus beneficios, radica además en que la mayoría de los receptores de este tratamiento hormonal son mujeres sanas.Laporte ha explicado que desde los años 60 se sabía que los estrógenos aumentaban el riesgo de cáncer de útero, y desde los 70 de mama, pero que a pesar de ello su uso resurgió con fuerza con el desarrollo de nuevas formas de administración a través de la piel, los parches, patentados por una empresa farmacéutica, y plantearse la hipótesis de que mejoran el colesterol y la función endotelial.
Para lanzarlos al mercado se hicieron algunos estudios para ver las indicaciones que tenían en mujeres menopáusicas y se vieron menos fracturas y osteoporosis, menos infarto de miocardio, y no más casos de cáncer de mama, aunque según matiza Laporte, se debía a que las mujeres que lo tomaban eran de clase alta y se cuidaban más.