El dictamen del Consejo de Estado sobre el reglamento de la ley de extranjería avala la legalidad del proyecto, considera que responde a los principios de la política de inmigración de la Unión Europea y destaca el carácter «especialmente innovador» del proceso de regularización de trabajadores inmigrantes.
Este informe era el último dictamen que esperaba el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales antes de que el Consejo de Ministros apruebe definitivamente el texto, previsiblemente el próximo 30 de diciembre.
Respecto al proceso de «normalización» de los trabajadores inmigrantes sin papeles que lleven seis meses en España y cuenten con un contrato de otros seis meses, el Consejo de Estado considera que es una fórmula «ajustada a derecho» y no encuentra en ella «reparos de legalidad».
En opinión de este órgano consultivo, la articulación de auténticas políticas de integración de los inmigrantes excede del ámbito del reglamento, pero sin embargo, al establecer un marco regular del acceso de los trabajadores no comunitarios en España, éste se convierte «en un instrumento fundamental en la articulación y orientación de la política estatal de inmigración y extranjería».Por este motivo, «valora positivamente» el texto y «el fortalecimiento que el mismo comporta de los mecanismos dirigidos a dar prioridad a la inmigración legal en España, entendiendo, en definitiva, que responde de manera cabal y adecuada a la consecución de los objetivos que se persiguen».
Para el Consejo de Estado el reglamento no es una mera adaptación de la ley de extranjería, sino «un texto bastante innovador que responde al cambio de orientación en la política de inmigración -como política de Estado basada en el consenso- a los principios esenciales que la informan y a los mecanismos arbitrados para su mejor realización».