En estos días se ha culminado la extracción del fuel que permanecía aún en el interior del petrolero «Prestige», cerca de 13.000 toneladas que están depositadas en el barco «Odín» a la espera de que el ministerio de Medio Ambiente y Repsol decidan su destino.
Así lo anunció ayer la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, que adelantó además la probable desaparición de la Oficina del Comisionado del Gobierno para el «Prestige», que sería sustituida por un centro de coordinación permanente, y el endurecimiento de las sanciones y multas para los propietarios de los buques que contaminan. Como resumen del informe que vio el Consejo de Ministros sobre los «casi dos años» que han pasado desde el hundimiento del «Prestige», dijo que las indemnizaciones a las Cofradías de pescadores están «prácticamente» pagadas y «ejecutados» la mayoría de los proyectos de restauración medio ambiental y descontaminación. El Consejo recibió un informe de la vicepresidenta primera sobre las actuaciones del Gobierno en relación con el «Prestige», en el que recuerda que para garantizar el pago de las indemnizaciones pendientes, se aprobó un Real Decreto que supuso una dotación de 249,5 millones de euros y que se ha creado un fondo de compensación para las pérdidas posteriores a 2003 de 3 millones de euros.
Fernández de Vega matizó que «todavía queda por analizar la documentación y llegar a acuerdos y efectuar determinados pagos» con Galicia, País Vasco, Cantabria y Asturias, «una fase que está también bastante avanzada».