Las partículas solares que viajaban en la cápsula de la nave «Génesis», que se estrelló el miércoles en un desierto del Estado estadounidense de Utah podrán ser analizadas a pesar del impacto, indicó ayer el Centro Francés de Investigación Petrográfica y Geoquímica (CFPG), que ha participado en la misión.
«Es perfectamente verosímil que una parte de las muestras sea analizable, porque el 'viento solar' estaba situado (en la cápsula) a una profundidad que garantiza su preservación respecto a la contaminación terrestre», indicó el CFPG en un comunicado. La cápsula, que contenía miles de millones de partículas de «viento solar», se estrelló en las arenas del desierto después de que el paracaídas que debía frenar la caída no se abriese y de que fallaran los intentos de dos helicópteros por atraparla en su descenso.
«Hará falta previsiblemente una fase suplementaria de limpieza», explicó el CFPG, que subrayó que «la preparación del análisis de las muestras continúa como estaba previsto».