La contratación hipotecaria se redujo muy ligeramente durante los meses de junio y julio, con tasas de crecimiento del 24,4 y 24,3 por ciento respectivamente, frente al récord del mes de mayo, en que registró una progresión del 24,8 por ciento, según datos de la Asociación Hipotecaria Española (AHE) facilitados ayer.
Aunque en términos porcentuales la tasa de julio no significa un nuevo récord, sí lo es en cuanto al volumen adeudado, al situarse en 535.321 millones de euros, lo que implica unas deudas contraídas con bancos, cajas y cooperativas de crédito superiores en 67.453 millones a las del cierre de diciembre de 2003.
En julio, las entidades financieras han visto incrementarse el saldo de hipotecarios pendientes de cobrar a clientes en un importe bruto de 13.250 millones, cifra que supera en un 2,5 por ciento la tasa de junio. Los bancos se impusieron al resto de las entidades como viene sucediendo en los últimos meses, al elevar un 21,3 por ciento el saldo hipotecario y situarlo en 190.607 millones.Las cajas, por su parte, mantuvieron el liderazgo del sector en términos de volumen, con hipotecarios por valor de 263.480 millones de euros y un aumento del 20,2 por ciento en julio. La cartera hipotecaria de las cooperativas de crédito aumentó un 16 por ciento, hasta 28.644 millones, mientras que la del resto de entidades financieras se situó en 5.423 millones, con un incremento del 82,2 por ciento.
En su estudio, la Asociación Hipotecaria Española subraya que «por el momento» tan sólo el crecimiento del paro registrado en agosto (especialmente en el mismo sector de la construcción) y la desaceleración de la economía nacional constituyen una «amenaza seria» para la actividad hipotecaria.