El Consejo General del Poder Judicial está dividido entre los vocales que consideran inconstitucional la Ley Integral contra la Violencia ejercida sobre la Mujer, y quienes defienden que se ajusta a la Constitución. Vocales designados a propuesta del PP tacharon ayer la Ley de «inconstitucional, chapucera y frívola», mientras que Montserrat Comas, vocal a iniciativa del PSOE, apoya su constitucionalidad de acuerdo a la doctrina del Tribunal Constitucional y del Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
La Comisión de Estudios del Consejo estudiará hoy el informe sobre la materia que ha elaborado Montserrat Comas, quien defiende en líneas generales la Ley y su constitucionalidad, aunque propone mejoras puntuales en varios aspectos. Argumenta que el hecho de prever delitos específicos cuyo sujeto pasivo es sólo la mujer, y no el hombre, supone una «discriminación positiva» en favor de la mujer avalada por la Constitución.