La ministra de Sanidad y Consumo, Elena Salgado, anunció ayer, ante la Comisión de Sanidad del Congreso, que el Gobierno ha iniciado ya «de forma urgente» la tramitación de un decreto que modificará el actual marco legal en materia de reproducción asistida.
En concreto, esta norma regulará la fecundación e implantación de ovocitos «de manera que se tengan en cuenta los problemas reales de los padres y se evite generarles más dolor y dificultades en el proceso», en referencia a las actuales limitaciones a la transferencia de ovocitos.
Además, este proyecto, que ya ha recibido el visto bueno de la Comisión Nacional de Reproducción Humana Asistida, «permitirá desbloquear» la investigación con preeembriones, «regulando los mecanismos de consentimiento de los donantes y la autorización de los proyectos y equipos de investigación».La aprobación de este decreto se enmarca en un proceso más amplio de reforma «a corto plazo» de la Ley de Técnicas de Reproducción Asistida de 1988 con el objetivo, según Salgado, de adaptarla a las necesidades actuales y dar respuesta «a las nuevas posibilidades técnicas y demandas sociales.
«Estas cuestiones requieren reflexión y diálogo en la comunidad científica y partidos políticos, pero también entendemos la preocupación de los pacientes y sus familiares, por lo que actuaremos con rigor pero sin demora», dijo. En este sentido, aseguró que el Ejecutivo de Zapatero tendrá presente en todas estas iniciativas «el beneficio de los pacientes», aunque buscará «el más amplio consenso político y social, teniendo en cuenta las recomendaciones de los expertos en estas materias».