El príncipe de Asturias y su prometida, doña Letizia Ortiz, realizaron ayer en el Congreso de los Diputados el primero de los encuentros institucionales previstos antes de su boda.
En su visita a la Cámara Baja, la pareja almorzó con los miembros de las Mesas del Congreso y del Senado, encabezados por sus respectivos presidentes, así como con los portavoces parlamentarios y los presidentes del Tribunal Constitucional y del Supremo.
La única ausencia fue la del portavoz de ERC en el Congreso, Joan Puigcercós, quien se excusó porque participaba en una reunión de la Comisión Permanente de su partido. Sí estuvo presente en el almuerzo el senador de ERC Carles Bonet.
A su llegada, don Felipe y su prometida fueron recibidos por los presidentes del Congreso, Manuel Marín, y del Senado, Javier Rojo, quienes los acompañaron hasta el vestíbulo de Isabel II del Palacio de las Cortes, donde firmaron en los libros de honor de ambas Cámaras.
Don Felipe relajó el ambiente dirigiéndose a los periodistas que seguían el acto, a los que comentó: «Estamos muy serios, ¿verdad?». Tras posar para los reporteros, se dirigieron al comedor de gala del edificio. Antes de sentarse a la mesa, don Felipe y doña Letizia saludaron a los comensales, con los que conversaron en el antecomedor. El menú consistió en acelgas rellenas de marisco, lomo de lubina y mosaico de frutas, con un vino blanco del Penedés y un tinto de Rioja.