Casi medio millón de trabajadores españoles sufren una nueva enfermedad: el 'mobbing' o acoso laboral que supone a las empresas un coste mínimo de entre 20.000 y 100.000 euros influyendo en una bajada de productividad de entre el 1 y el 2%. Las administraciones publicas, la defensa y la sanidad son los sectores más afectados de este acoso que afecta al 3% de la población ocupada. Según el segundo informe Randstad sobre acoso moral sólo recurren a los tribunales el 0,01% de las personas intimidades principalmente por los mandos jerárquicos.
Carlos Obeso, director del Instituto de Estudios Laborales (IEL) de ESADE, asegura que en España hay una escasa conciencia social y empresarial del problema. Así, en los últimos tres años, en nuestro país se dictaron en los tribunales sólo 46 sentencias por 'mobbing', de las que la mitad se rechazaron.
Una de las situaciones más negativas que se derivan de estas prácticas es que en la mayoría de los casos reconocidos judicialmente como acoso moral suponen que el afectado opta por la extinción del contrato laboral con indemnización, con lo que el acosador obtiene su deseo de que la víctima se marche del trabajo.