EFE-EL VATICANO
El papa Juan Pablo II, de 83 años, agradeció ayer a todos «de
corazón» las felicitaciones y las oraciones por sus 25 años de
Pontificado, que se cumplen hoy, y se mostró feliz por el apoyo que
se le ha brindado en estos años.
Los agradecimientos lo expresó durante la audiencia pública de los miércoles celebrada en la plaza de San Pedro del Vaticano ante más de 20.000 personas y durante la que mostró buen aspecto, sonrió e incluso bromeó con algunos de los más de cien religiosos, entre cardenales, obispos y sacerdotes, que acudieron a felicitarle.
Aunque al principio de la audiencia, tenía la voz débil, sobre todo durante los saludos en diferentes idiomas, conforme avanzó la ceremonia, se le vio recuperado y con la pronunciación fuerte y clara.
Como ya ocurrió la semana pasada, y para no fatigarle, eclesiásticos vaticanos leyeron en diferentes idiomas los resúmenes de la catequesis. Juan Pablo II se limitó al final de cada lectura a saludar en ese idioma.Así, en español, saludó «con afecto» a los varios centenares de españoles y latinoamericanos presentes, entre ellos miembros de la Hermandad de Veteranos de las Fuerzas Armadas, a la Asociación de Heraldos del Evangelio, de Perú, y a mexicanos, argentinos y costarricenses.
Los españoles y latinoamericanos le felicitaron por los 25 años de papado y le expresaron, tal y como leyó un eclesiástico vaticano, en español, «gratitud y afecto». Juan Pablo II, al que se vio feliz, entró en la plaza de San Pedro mientras los fieles cantaban «La barca de Pedro», del español Cesáreo Garabain, a la que se siente muy ligado. Abandonó el lugar a los sones de la misma.