Casi cinco millones de personas murieron en 2000 en el mundo por enfermedades relacionadas con el consumo de tabaco, según una investigación que publica ayer la revista médica británica «The Lancet».
El estudio, realizado por la Escuela de Sanidad Pública de Harvard en Boston (EEUU) y la Universidad de Queensland (Australia), indica también que, por primera vez, el número de muertes por tabaquismo fue similar en los países desarrollados y en vías de desarrollo.
Según los autores, 4,83 millones de fumadores fallecieron en todo el mundo, de los que 2,41 millones pertenecían a países en vías de desarrollo, frente a los 2,4 millones fallecidos en los países industrializados.
Cerca de un 75 por ciento de los casi cinco millones muertos por tabaquismo fueron hombres, cifra que ascendió al 84 por ciento en los países poco desarrollados, donde residen 930 de los 1.100 millones de fumadores contabilizados en el mundo.
La principales causas de esas muertes fueron las enfermedades cardiovasculares y pulmonares asociadas al consumo de tabaco, afirma el estudio, que se basa en datos de 125 países sobre fallecimientos por cáncer de pulmón y padecimientos asociados al acto de fumar. Estas conclusiones se divulgaron mientras las empresas tabaqueras intentan dirigir la venta de sus productos a naciones más pobres.