La tasa de fecundidad en España, que mide el número medio de hijos por mujer, se situó el año pasado en 1,26, su valor más alto desde 1993, y también aumentó el número de nacimientos, el 10,4 por ciento de los cuales correspondió a madres extranjeras.
Según el avance 2002 sobre Movimiento Natural de la Población difundido ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de fecundidad pasó el año pasado del 1,24 registrado en 2001 a 1,26, con lo que «prosigue su recuperación».
El INE recuerda no obstante que en el periodo 1996-2001 España ha ocupado el último puesto entre los países de la Unión Europea por su tasa de fecundidad; habrá que esperar a que el resto de los países ofrezcan datos de 2002 para ver si sube en la clasificación.
Durante 2002 se registraron en España 416.518 nacimientos, 12.659 más que en 2001, lo que ha llevado la tasa bruta de natalidad -que refleja el número de nacimientos por cada 1.000 habitantes- del 10,03 al 10,14.
El INE destaca que el incremento total de nacimientos se debió casi en su totalidad a la fertilidad de las madres extranjeras, que va en aumento: en 2002 se registraron 43.469 nacidos de madre extranjera, un 31,4 por ciento más que los 33.076 registrados el año anterior.Del total de nacimientos, los de madre extranjera supusieron en el año 2002 el 10,4%, frente al 8,2% del año 2001 y el 6,2% del año 2000.