EUROPA PRESS-LONDRES
Los obesos y los grandes fumadores deberán comprometerse firmemente
a dejar sus hábitos -haciendo dieta y dejando de fumar
respectivamente- si quieren seguir recibiendo asistencia gratuita
por parte de la sanidad pública británica.
El Gobierno británico está estudiando un nuevo plan que se basa en obligar a las personas obesas y fumadoras a que firmen un contrato para que se comprometan a llevar un estilo de vida saludable. Si incumplen su compromiso, la sanidad pública dejaría de tratarles, según aseguró ayer el diario 'The Times'.
Esta medida se enmarca dentro de la creciente preocupación que se vive en el Reino Unido por el elevado número de enfermedades y muertes relacionadas con el tabaco, el alcohol, las dietas poco saludables y el estrés que podrían evitarse. Estos problemas sitúan a los británicos entre los ciudadanos más afectados por enfermedades como el cáncer de pulmón o el infarto de corazón.
Estas propuestas pueden formar parte del manifiesto laborista que se presentará para las próximas elecciones generales, y según indica el periodico quieren presionar a los ciudadanos para que el sistema de seguridad británico no tenga que hacer frente a las innumerables enfermedades resultantes de la obesidad o del consumo de tabaco.
Según estas propuestas, es lógico ofrecer tratamiento gratuito, pero es lógico obtener también a cambio las garantías de que se está siguiendo el tratamiento adecuado y que se están siguiendo las instrucciones indicadas por los médicos, tanto a nivel nutricional como para superar adicciones.