Científicos estadounidenses anunciaron ayer que planean crear una nueva forma de vida en un laboratorio, un proyecto que plantea difíciles interrogantes éticos. Los científicos intentarán reemplazar el material genético de un organismo de una sola célula con genes producidos artificialmente. «Acabamos de comenzar lo que será una tarea larga, pero llena de desafíos, que consiste en intentar crear un genoma sintético», dijo Hamilton Smith, científico a cargo del proyecto. El genoma es el conjunto de los genes de un ser. «Estoy seguro de que el proyecto puede tener éxito».
Pero los peligros de la investigación son grandes, admitieron los científicos a cargo del proyecto, Craig Venter "'padre' del genoma humano y premio Príncipe de Asturias de Investigación" y Smith, Nobel de Fisiología y Medicina. Los científicos explicaron que modificarán la célula para que no pueda subsistir fuera del laboratorio o sea dañina a los seres humanos. Sin embargo, el director del Centro de Bioética y Dignidad Humana, John Kilner, dijo que tal precaución no es suficiente para garantizar la seguridad del proyecto, ya que la investigación podría usarse en un futuro para producir armas biológicas.
«Se necesita desarrollar la capacidad para neutralizar el uso incorrecto de la nueva tecnología, al mismo tiempo que se desarrolla ésta, no después», dijo Kilner. Los científicos pretenden añadir genes al nuevo ser para que procese dióxido de carbono o produzca hidrógeno, que podría usarse como fuente de energía.«Dado el crecimiento continuo del consumo de combustibles y el serio daño al medio ambiente, es imprescindible que exploremos ideas alternativas para mitigar esta situación», declaró Craig Venter. No obstante, el primer desafío para los científicos es entender todas las facetas biológicas de la existencia de un ser vivo, lo que aún no han logrado.