Durante un encuentro ayer con los periodistas, y en respuesta a una pregunta de los periodistas, el secretario y portavoz de la Conferencia Episcopal, el obispo auxiliar de Toledo, Juan José Asenjo, precisó que el Derecho Canónico no establece como causa de nulidad de un matrimonio los malos tratos. El portavoz de los obispos agregó que la Iglesia condena con toda rotundidad los malos tratos y defiende «la igual dignidad del hombre y la mujer», pero el tema de los malos tratos «es un asunto sobrevenido a la celebración del matrimonio» y no está contemplado por la doctrina de la Iglesia como causa de nulidad del sacramento.
En relación con la polémica surgida ayer en torno a la película «Cactus», Asenjo se reiteró en las declaraciones del secretario de la Comisión de Medios de Comunicación Social de la Conferencia Episcopal, José María Gil Tamayo, efectuadas ayer a Efe, negando cualquier tipo de presión por parte de la jerarquía eclesiástica para evitar la exhibición de la película. Juan José Asenjo indicó que se trata de una «burda» campaña de publicidad, señaló que José María Gil «se reserva las acciones legales oportunas» y que éste, acusado durante una rueda de prensa de las supuestas presiones», ni conoce la película ni a su director».
La película está dirigida por Pau Freixas y producida por Salomon Shang y José Luis García, de Producciones Klapan, y su estreno está previsto para el próximo 15 de noviembre. Tanto Shang como García concretaron que las denuncias le llegaron en forma de varias llamadas de la Diócesis de Barcelona, en concreto de Carlos Alberto Viña, vicario general y judicial de la diócesis de Barcelona y de José María Gil Tamayo, director de la Comisión de Medios de Comunicación social de la Conferencia Episcopal Española (CEE).