El Patronato del Archivo General de la Guerra Civil española consideró ayer que «no procede adoptar ninguna iniciativa» en relación a la posible salida de documentos de este Archivo, solicitada por la Generalitat de Catalunya, con lo que «estima zanjada la cuestión». Según un comunicado remitido por el Ministerio de Cultura, esta decisión se adoptó ayer tras reunirse el pleno del Patronato, presidido por la ministra de Educación y Cultura, Pilar del Castillo, que estudió los informes de la Comisión Técnica.
El retorno de documentos de la Generalitat republicana que se encuentran en el Archivo de Salamanca es una vieja reivindicación del Gobierno catalán sobre la que hay un acuerdo de Consejo de Ministros de marzo de 1995, en la que se aprobó la devolución a Catalunya de los denominados «Papeles de Salamanca». Según la resolución aprobada ayer, la Comisión Técnica Patronato/ Generalitat de Catalunya, creada a tal efecto hace un año, «ha dado por finalizados sus trabajos sin alcanzar ningún acuerdo y sin emitir una propuesta unitaria».
El informe de los dos historiadores nombrados por el Patronato considera, como parte sustancial del Archivo, «toda la documentación relativa a la Guerra Civil así como a los años que la precedieron y los posteriores», planteamiento que el Patronato estima «acertado». Sin embargo, la propuesta elaborada por los historiadores nombrados por la Generalitat, consistente en depositar en el Archivo Histórico Nacional de Catalunya todos los documentos anteriores a 1936 que tengan relación con esta comunidad, «es incompatible con la unidad del Archivo de Salamanca», según el Patronato. En la resolución, el Patronato insiste en la necesidad de preservar la unidad del Archivo, «en correspondencia con su origen y naturaleza y con los principios archivísticos defendidos para casos similares por la Unesco», y apuesta por la «consolidación y ampliación de los fondos y actividades».
El 'conseller en cap' de la Generalitat, Artur Mas, insistió en el deseo del Gobierno catalán de que se devuelvan a Catalunya la totalidad de los documentos requisados durante la Guerra Civil que se encuentran en el Archivo de Salamanca, aunque se mostró dispuesto a rebajar la reivindicación siempre que se alcance un acuerdo «digno». En cambio El portavoz de ERC, Joan Ridao, afirmó esta tarde que la negativa del Patronato es una «auténtica burla» y supone «consumar un acto de expoliación realizado al amparo de la legalidad franquista».